La distinción fue entregada el 7 de septiembre, en la solemne ceremonia de apertura del curso académico 2022-23, realizada en el emblemático Paraninfo. Estuvo presidido por el Rector de la Universidad, el Dr. D. José Vicente Saz Pérez, quien realizó un especial reconocimiento a la Fundación por “ayudarnos a mantener en la memoria a las víctimas del brutal atentado del 11 de marzo de 2004 y extenderla, a través del impulso de valores como la paz, la libertad y la democracia; por apoyar los trabajos de investigación, innovación y desarrollo que fortalecen los valores de convivencia y tolerancia en la sociedad. Y, por premiar a los jóvenes ingenieros cuyos proyectos de fin de carrera ofrecen aplicaciones sociales relevantes”.

La medalla fue recogida por la Presidenta de la Fundación, Dª Ana Isabel Hidalgo. Al acto asistieron también D. Juan Benito y D. José Ignacio Martínez, miembros del Patronato.

La relación de la Universidad de Alcalá con la Fundación Rodolfo Benito Samaniego se remonta al año 2004. Precisamente, el 24 de junio de ese año, en el Salón de Conferencias Internacionales fue donde se realizó la presentación oficial de la Fundación y donde se proclamaron los dos pilares esenciales de su homenaje a Rodolfo y a todas las víctimas del 11M: la defensa de los valores de convivencia, tolerancia y libertad y el impulso a la investigación científico tecnológica puesta al servicio de la sociedad.

La Universidad de Alcalá, con su entonces rector magnífico, D. Virgilio Zapatero Gómez, se firmó un convenio de colaboración para la organización y desarrollo de las actividades propias de la Fundación. La colaboración se ha mantenido con su sucesor, D. Fernando Galván Reula y D. José Vicente Saz, sus respectivos equipos de gobierno, el personal académico y administrativo. Gracias a ese convenio, tiene lugar cada año la entrega de los Premios Anuales; el Ciclo de conferencias sobre convivencia y tolerancia en la sociedad actual; los actos “Toma mi mano. Encuentro de convivencia” y los cursos de formación. Precisamente estos cursos –que llegan este año a su décima edición- son una apuesta por divulgar la cultura de los derechos humanos y promover los valores de convivencia y tolerancia; así como diseñar propuestas de políticas activas que favorezcan a los grupos más vulnerables y sirvan para afrontar los nuevos retos generados por la violencia en cualquiera de sus formas. Cada año la Fundación asume el reto de organizar un curso distinto y novedoso. Así se han abordado temas sobre medios de comunicación, protección medio ambiente, la problemática de las grandes ciudades, multiculturalismo, educación, retos demográficos, cooperación al desarrollo, etc. Los cursos han sido reconocidos por la Universidad como créditos docentes, lo cual representa un importante reconocimiento a la labor de formación en valores que realizamos. Han contado con la certera dirección de las catedráticas Dª Nazareth Pérez de Castro y Dª María Marcos González, profesoras de esa alta casa de estudios. En las relaciones entre la Fundación y la Universidad siempre debemos destacar –por la inmensidad de su trabajo- al servicio de Protocolo y a la Oficina Tecnológica.

Visto ello, la gratitud de la FRBS con la U. Alcalá está ampliamente avalada. Tal es así que fue merecedora del Premio Extraordinario X Aniversario y de varias Palomas (reconocimiento individual que se concede colaboradores y voluntarios destacados).

Ahora llega, por acuerdo del Consejo de Gobierno, un reconocimiento por la aportación que la Fundación hace a la Universidad de Alcalá. Una condecoración que la FRBS nunca imaginó recibir y que ha aceptado, con gran emoción y sentido de responsabilidad por el inmenso reto que representa en su trabajo. También es otro hermoso homenaje a Rodolfo pues la docencia –junto a la ingeniería- fue una de sus grandes pasiones.